Ha llegado por fin el momento, Criatura No Muerta, de que sepas quiénes se te han incorporado. Son gente de cada rincón de estas tierras, con motivaciones y deseos diversos. Deja que se reconforten a tu lado mientras te narran sus historias…

 

En el anterior post hablaba de dos elementos imbuidos dentro de los propios videojuegos que nos ayudarían a crear a los personajes jugadores. Mencionaba que junto con estos dos elementos, las Clases y los Juramentos, quería incorporar un tercero: la Manera de Jugar.

 

Por mi experiencia con el juego, he visto (tanto en mí como en otras personas) que hay múltiples maneras de afrontar la experiencia del juego, y que mucha gente incluso se centra en una para luego probar otras en sucesivas partidas nuevas. Esa flexibilidad y, sobre todo, esa rejugabilidad son, en mi opinión elementos que han convertido a la saga Dark Souls en una obra de culto.

 

Analizando este elemento, nos podemos encontrar con:

 

• La persona que juega de la forma más directa. Va del punto A al B, luego al C, y así sucesivamente, sin explorar caminos secundarios o buscar secretos. Para esta persona, el juego tiene un argumento claro, y, aunque no sea totalmente lineal, sigue la ruta más rápida que se le va indicando.Este sería un tipo de juego Básico.

• Quien se pone a jugar… y no termina. Tras enfrentarse treinta veces contra el mismo jefe, decide que la frustración le supera. Su personaje se ha quedado a medio camino, y no irá más allá. A este tipo de juego lo calificaríamos como Desesperado.

• La persona completista, que está dispuesta a explorar cada rincón, a arriesgarse a dejarse caer por ese barranco, a volver a zonas por las que ya ha pasado tres veces por si ahora hay algo nuevo, que agota las conversaciones con cada PNJ, y aun así vuelve a hablarles por si tienen algo nuevo que decir. Y con el conocimiento que adquiere descubre que lo que se presenta a simple vista como verdades evidentes pueden esconder motivos más siniestros…La calificación de este juego puede ser Explorador.

• Hay gente que lo que más disfruta es la parte cooperativa del juego. Colocan su señal frente a toda hoguera, mientras esperan a que se les invoque para ayudar a quien les invoque. Les encanta mostrar los puntos débiles de jefes, mostrar ese objeto escondido que descubrieron, y ser buenos samaritanos mientras no dejan de Alabar al Sol. A este tipo de juego lo llamaremos Colaborador.

• Otra gente, por el contrario, lo que les gusta es la invasión. Colarse en el mundo de esa persona que ha conseguido superar mil y una dificultades, y demostrarle que el enemigo más peligroso es y será el ser humano con ganas de fastidiarte la partida. Este sería claramente un tipo de juego Invasor.

• Está la gente que lleva su completismo al máximo nivel. No sólo se completan el juego (varias veces si es necesario), sino que logran todos los trofeos de Steam, Xbox o PS4, da igual el tiempo que les lleve. Suena obvio, pero este tipo de juego lo llamaremos Completista.

 

Estos son, claro está, generalizaciones, que luego pueden tener toda una serie de variables que las alteren. Pero para el propósito de este ReV, dejémoslos así, pues nos sirve para pasar a concretar los personajes jugadores.

 

Quiero recalcar algo que ya he dicho anteriormente: No existe una forma “buena” o formas “malas” de jugar a Dark Souls. En mi opinión, todas y cada una de ellas son válidas. Sí, incluso dejar al juego por no poder más con él es una forma legítima de enfrentarse al mismo, y tiene su lugar en el trasfondo del mismo.

 

Ahora, cogiendo las tres variables establecidas anteriormente (recordemos, Clase, Juramento, y Manera de Jugar), queda crear a los personajes. Para cada uno daré un nombre, y acompañaré con una imagen, que, aunque no corresponda al 100% con la descripción dada en texto, ayudará a ilustrar la idea que quiero dar de cada uno:

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• Dunstan, de Balder:

Clase: Caballero

Juramento: Centinelas Azules

Tipo de juego: Básico

Llegaste a esta tierra siguiendo una antigua profecía, una que hablaba de que alguien superaría todas las pruebas, haría tañer las campanas, y conquistaría los más poderosos enemigos. Hasta ahora, has demostrado encarnar a ese Ser No Muerto profetizado a cada paso, y te lo han ido confirmando, tu destino es ser regente, y enlazar el fuego tal como se hizo antes, para permitir que la luz perdure y frenar el avance de la oscuridad. Estás muy muy cerca de cumplir con tu destino, poco se interpone ya en tu camino…

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• Denegyth, de las Tierras Olvidadas:

Clase: Vagabundo

Juramento: Apiladores

Tipo de juego: Explorador

Viniste aquí dese… Ya no lo recuerdas. De hecho, esa fue tu motivación principal. Te convertías en un ser Hueco, y cada día tu memoria fallaba más. Oíste que en esta tierra existía una cura a tu mal, pero sin embargo acabaste embarcándote en una absurda lucha por alcanzar un mítico trono. Absurda, porque has descubierto las mentiras tras la historia que te contaron. Es todo una trampa, enlazar el fuego sólo lleva a alargar una era que ya hace mucho debería haber terminado. La oscuridad no es sino el siguiente paso del ciclo, y negarla es negar la propia oscuridad de la que surgió el alma humana.

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• Bertram, de Astora:

Clase: Guerrero

Juramento: Herederos del Sol

Tipo de juego: Colaborador

¡Bendito sea el Sol! Llevas tiempo caminando por esta tierra que se sumerge en el crepúsculo, buscando el rastro que te lleve de vuelta a donde el gran astro brilla como un padre acogedor. Aunque todo parece perdido en las tinieblas, nunca pierdes la esperanza, y mantienes el buen humor hasta el final. Ese optimismo te impulsa a seguir adelante, y a prestar tu ayuda a cualquiera que la necesite, honrando así tu juramento a ese anónimo dios de la guerra del cual supiste hace tanto.

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• Balthid, de Farron:

Clase: Heraldo

Juramento: Senda Azul

Tipo de juego: Desesperado

Todo es inútil. ¿Cómo es que no pueden verlo? Has luchado una y mil veces contra enemigos de poder inimaginable, creyendo que avanzabas hacia algún mítico final, pero todo es para nada. Siempre hay alguien más a quien enfrentarse, otro monstruo, otro demonio… Y ya no puedes más. El sentimiento de abatimiento supera cualquier otra consideración, y si por ti fuera, te quedarías frente a esta hoguera hasta que el fin del mundo te alcanzara. Bueno, tal vez todavía te queden fuerzas para una última lucha. O dos. Pero no más. Esto es tan, tan cansado…

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• Ordmaer, de Throrolund:

Clase: Clérigo

Juramento: Blanca Vía

Tipo de juego: Básico

¿Habrá llegado alguien tan lejos antes en su peregrinaje? Lo dudas. Desde que te embarcaste en este bendito viaje, en el que has narrado y escuchado milagros de quienes sirvieron a los dioses antes, has conocido todo tipo de horrores, pero también todo tipo de señales del poder de aquellos que guían los designios del mundo. Esto es todo una prueba, destinada para quienes tienen la fe suficiente para superarla. Y tú lo harás, llegarás al final, pues su voluntad es suprema, y tú su sirviente.

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• Cenwalh, de Olaphis:

Clase: Asesino

Juramento: Dedos de Rosaria

Tipo de juego: Invasor

¿Es a esto a lo que se reduce la humanidad? Un puñado de seres endebles que se tambalean entre las tinieblas en busca de una pobre llama. Deberías acabar con sus miserables existencias… y de hecho, lo harás. Los restos de humanidad que conservan están malgastados en estas excusas de seres humanos. Así que será mejor matarles, arrebatar su humanidad, y sacar provecho de la misma. Sí, no se alegrarán cuando vuelvan a la vida, pero ¿acaso eso importa, cuando las tinieblas lo engullan todo y no haya sino seres huecos poblando estas tierras? 

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•  Osgyth, de Vinheim:

Clase: Hechizero

Juramento: Espadas de la Luna Oscura

Tipo de juego: Colaborador/Invasor

Hace tiempo, llegaste frente a las puertas de la más bella ciudad jamás imaginada, una ciudad de dioses donde siempre brilla el sol. Y ahí te embelesó la belleza y el poder de una diosa, de tal forma que te viste de rodillas frente a ella casi sin dudarlo. Juraste que desde entonces protegerías tanto a las criaturas más débiles de esta tierra, así como perseguirías a quienes pecan contra las divinidades que han guiado a la humanidad bajo su luz.

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• Estrid, del Gran Pantano:

Clase: Piromante

Juramento: Camino del Dragón

Tipo de juego: Completista

Los dioses son culpables del más horrible de los crímenes: el genocidio de los Dragones Eternos, los dueños originales de este mundo. En su ambición, masacraron a estas magníficas bestias. Pero no todos murieron. En tus viajes te encontraste con uno de ellos, y ante él, juraste seguir su camino, añadir a tu humanidad las características de su magnificencia, y, si pudiera darse el caso, vengar el crimen atroz que se cometió contra ellos.

 

Creo que estos ocho personajes son un buen punto de partida para un ReV, aunque sería posible añadir muchos más combinando los elementos mencionados. Sin embargo, en este punto me gustaría añadir otro más, uno que puede suponer spoilers respecto a la más oscura trama del tercero de los videojuegos, y que también menciono aparte por ser el único personaje jugador que no es humano:

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•  Nalsann, de Londor:

Clase: Hechicero Oscuro

Juramento: Peregrinos de la Oscuridad

Tipo de juego: No aplicable

No naciste del vientre de una mujer, tal como hacen los seres humanos. Tu origen se remonta a cuando la manifestación física del alma oscura humana fue derrotada hace miles de eras. En ese momento, fragmentos de esa oscuridad se dispersaron por el mundo, adquiriendo forma humana. Tú eres uno de esos fragmentos, retornado con un conocimiento tan peligroso como necesario. Pues sabes que todo es mentira. Enlazar el fuego solo sirve para alargar una era que debería haber muerto hace milenios, y permitir que llegue la oscuridad es una mera distracción, hasta que otro “ser de la profecía” vuelva a prender esa maldita llama. No, si la humanidad quiere ser realmente libre, ha de arrebatar el ciclo a los dioses, negarles su juego de luz y tinieblas. Estás en disposición de elegir a quien lidere al mundo a esa nueva era, pero ¿habrá alguien dispuesto a realizar las tareas que requiere?

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Con esto, definimos a nuestros personajes jugadores, para pasar a la siguiente fase: Las tramas, generales y particulares, que motivarán sus acciones.

 

Pero de nuevo toca descansar. Las llamas te reconfortarán, y te guiarán hacia tu objetivo final…